jueves, 2 de julio de 2015

Hombre que miraba a la luna.- Mario Benedetti

Es decir la miraba porque ella 
se ocultó tras el biombo de nubes 
y todo porque muchos amantes de este mundo 
le dieron sutilmente el olivo 

con su brillo reticente la luna 
durante siglos consiguió transformar 
el vientre amor en garufa cursilínea 
la injusticia terrestre en dolor lapizlázuli 

cuando los amantes ricos la miraban 
desde sus tedios y sus pabellones 
satelizaba de lo lindo y oía 
que la luna era un fenómeno cultural 

pero si los amantes pobres la contemplaban 
desde su ansiedad o desde sus hambrunas 
entonces la menguante entornaba los ojos 
porque tanta miseria no era para ella 

hasta que una noche casualmente de luna 
con murciélagos suaves con fantasmas y todo 
esos amantes pobres se miraron a dúo 
dijeron no va más al carajo selene 

se fueron a su cama de sábanas gastadas 
con acre olor a sexo deslunado 
su camanido de crujiente vaivén 

y libres para siempre de la luna lunática 
fornicaron al fin como dios manda 
o mejor dicho como dios sugiere.

viernes, 10 de abril de 2015

Poco más o menos, amor

Poco más o menos, amorSalvador Espriu
Estalla tu risa, y miro
cómo crece en la garganta
un vulgar disfraz
de deseos metafísicos.

Ante mí, creerías
que pienso en ti, cuando siento
tan solo pesadumbre de árboles,
salvajes clamores de sueños.

Te he visto llena de tristes
pecados y faringitis.
Mas, detenido para siempre
por fríos obstáculos de horas,
tanto da que te ame,
a ti o a cualquier otra.

sábado, 21 de febrero de 2015

¿De qué modo te quiero? Elizabeth Barret Browning

¿De qué modo te quiero? Pues te quiero
hasta el abismo y la región más alta
a que puedo llegar cuando persigo
los límites del Ser y el Ideal.

Te quiero en el vivir más cotidiano,
con el sol y a la luz de una candela.
Con libertad, como se aspira al Bien;
con la inocencia del que ansía gloria.

Te quiero con la fiebre que antes puse
en mi dolor y con mi fe de niña,
con el amor que yo creí perder

al perder a mis santos... Con las lágrimas
y el sonreír de mi vida... Y si Dios quiere,
te querré mucho más tras de la muerte.